Pomerania

El pomerania, pomerano, o pomeranio (también conocido como: Spitz toy alemán, Lulú de Pomerania, pome o bodo) es una raza canina de la familia Spitz, que recibe su nombre de la región de Pomerania Central, actualmente en Polonia, y se clasifica como perro toy (juguete) por su pequeño tamaño.

El Spitz Alemán es la raza de perro más antigua de Europa Central y es el ancestro de la mayoría de las razas tipo spitz reconocidas hoy en día.

Los primeros Pomerania eran mucho más grandes que el estándar actual (podían rondar los 13 kg), pero mediante la cría se logró reducir el tamaño del perro y desarrollar una amplia variedad de colores de pelaje.

Se denomina Spitz a un grupo de razas caninas que tienen como características comunes el poseer dos capas de pelo, la primera corta y lanosa, que los protege de las inclemencias del tiempo, la segunda capa está formada por pelo largo, liso y despegado del cuerpo, cabeza con pelo corto que recuerda a la del zorro con orejas pequeñas y puntiagudas que reducen la pérdida de calor y el riesgo de congelación y la cola levantada, curvada y apoyada en la espalda. Son muy parecidos físicamente a los perros nórdicos.

Los antepasados del pomerania eran perros de trineo en Islandia y Laponia, que llegaron a Europa a través de Pomerania.

La región de Pomerania, bañada al norte por el mar Báltico y limitada al oeste por la isla de Rügen y al este por el río Vístula, ha sido ocupada por muchos pueblos: celtas, eslavos, polacos, suecos, daneses y prusianos. Su nombre procede de Pomore o Pommern, lo que significa “junto al mar”, y le fue dado en tiempos de Carlomagno. Es en Pomerania donde el Spitz ganó fama como mascota y perro de labor.

Parece casi seguro que los pomeranias descienden de los perros que tiran de los trineos en el Ártico y que están emparentados también con el keeshond, el cazador de alces noruego y el samoyedo. Los primeros rastros fiables de esta raza proceden de Pomerania, una región en el litoral del mar Báltico, y se remontan al siglo XIX, aunque esos perros eran mucho más grandes (unos 13 kilos). Allí nacieron camadas de hasta diez cachorros y, muy pronto, los más pequeños de las camadas se convirtieron en los preferidos. A mediados del siglo XIX, la raza se había extendido a otros países europeos y, en 1888, la reina Victoria de Inglaterra se enamoró de esta raza, lo que impulsó la popularidad de los pomeranias. Los criadores británicos los cruzaron para obtener un tamaño cada vez más pequeño y pelaje más abundante.

El Pom, también conocido como Zwergspitz en algunos países, es la más pequeña de las razas de spitz. Con su apariencia elegante y porte majestuoso, se podría decir que los pompones son “aptos para una reina”, y estaría en lo cierto. La popularidad del Pom se debe en gran parte a la reina Victoria, quien se enamoró de la raza mientras visitaba Florencia, Italia. Cuando la reina viuda, feliz por los perros, regresó a Gran Bretaña con Poms a cuestas, la fama de la raza estaba asegurada.

Es un perrito muy vivaracho rebosante de energía que permanece fiel a sus familias. Al pomerania le encantan que lo lleven y lo traigan de allá para acá, pero ten cuidado y no te excedas puesto que también necesitan andar ellos solos con relativa frecuencia. Es un excelente perro guardián, ya que es muy ladrador. A pesar de su carácter dulce y cariñoso, hay que llevar cuidado, sobre todo en el caso de los niños más pequeños, ya que estos perros son bastante frágiles y no es extraño observar fracturas de patas.

El pequeño Pomerania, durante mucho tiempo un favorito de la realeza y los plebeyos por igual, ha sido llamado el compañero ideal. El pelaje glorioso, la cara sonriente y astuta y la personalidad vivaz han ayudado a que el Pom sea una de las razas de juguetes más populares del mundo. El Pomerania combina un cuerpo diminuto y un comportamiento imponente de perro grande. La abundante capa doble, con su volante que se extiende sobre el pecho y los hombros, viene en casi dos docenas de colores y varios patrones y marcas, pero se ve más comúnmente en naranja o rojo. Alerta e inteligente, los pomerania son fáciles de entrenar y son excelentes perros guardianes, mascotas alegres para familias con niños lo suficientemente mayores como para saber la diferencia entre un perro de juguete y un juguete. Los pompones son activos pero se pueden ejercitar con juegos en el interior y caminatas cortas.

Al Pomerania le irá bien con un alimento para perros de alta calidad, ya sea fabricado comercialmente o preparado en casa con la supervisión y aprobación de su veterinario. Cualquier dieta debe ser apropiada para la edad del perro (cachorro, adulto o senior). Algunos perros son propensos a tener sobrepeso, así que vigile el consumo de calorías y el nivel de peso de su perro. Las golosinas pueden ser una ayuda importante en el entrenamiento, pero dar demasiadas puede causar obesidad. Conozca qué alimentos humanos son seguros para los perros y cuáles no. Consulte con su veterinario si tiene alguna inquietud sobre el peso o la dieta de su perro. El agua limpia y fresca debe estar disponible en todo momento.

El pomerania requiere poco esfuerzo en cuanto al ejercicio diario y le bastará con paseos cortos o con una carrerita en el jardín. Sin embargo, puede recorrer distancias considerables sin llegar a cansarse.

El Pom debe ser entrenado para caminar con correa desde el principio y enseñarle a venir cuando lo llamen. El allanamiento de morada puede ser un desafío, por lo que la constancia y la paciencia son la clave. Es importante evitar que su Pom salte dentro y fuera de los sofás o las camas, ya que pueden lesionar las articulaciones o incluso romper un hueso. Los poms están alertas y son muy inteligentes, disfrutan y pueden sobresalir en actividades caninas como la agilidad, el rally y la obediencia, o trabajar como perros de terapia.

Por mucho que los Pomerania disfruten de ser perros falderos y compañeros de familia, se benefician de un poco de ejercicio y disfrutan de la oportunidad de correr, jugar y pasear. Asegúrese de vigilar de cerca a su Pom cuando esté afuera. Son conocidos por escapar a través de pequeñas grietas o huecos en las cercas, o trepar por cercas cortas. Las razas pequeñas como los Pomeranias pueden ser confundidas con conejos o ardillas por aves grandes y depredadoras como halcones y búhos, por lo que es vital mantener a un Pom a cubierto o permanecer con ellos en todo momento. Cuando lleve a su Pom a caminar, tenga cuidado con su entorno. Otros perros que no están controlados pueden lastimar fácilmente a tu Pom.

Como ocurre con muchas razas pequeñas, el pomerania puede padecer desplazamientos temporales de la rótula (luxaciones de rótula). Otros problemas comunes en el pomerania son las afecciones oculares, una enfermedad que le provoca pérdida de pelo y problemas en la tráquea que le hacen toser con asiduidad.

Los pomerania son generalmente perros pequeños saludables, y los criadores responsables examinan a sus animales en busca de condiciones de salud como rótulas dislocadas (rótulas que se salen de su lugar), hipotiroidismo, colapso de tráqueas, insuficiencia cardíaca congestiva, convulsiones y alopecia X (enfermedad de la piel negra). La Fundación Ortopédica para Animales (OFA) es un registro que mantiene información de exámenes de salud en una base de datos pública. Asegúrese de solicitar al criador copias de los resultados OFA de los padres de la camada cuando considere un cachorro.